¡NO QUÉ NÓ!

 BALCONEANDO

#LaColumnade Alejandro Barañano 🖋️

A finales de febrero pasado, en este mismo espacio comentamos que el ahora abanderado a la Presidencia Municipal de Los Cabos por el Movimiento de Regeneración Nacional, o sea, Oscar Leggs Castro, mostró su lado más ruin al convertirse en un ser despreciable y desagradecido al traicionar a quien en su momento lo ayudó.

También se dijo que pese a las pruebas contundentes que existen en su contra, esto por haber solicitado una suma millonaria en calidad de préstamo, Oscar Leggs Castro, careciendo de humildad, honestidad y vergüenza negó el hecho al grado que hasta le dio por desconocer el empréstito recibido, y para ello fue que alguien alteró e hizo uso indebido del documento que el mismo suscribió.

Así pues, sostuvimos y lo volvemos a reiterar, para Oscar Leggs Castro el honor y la palabra empeñada son meras especies en vías de extinción, pues en todo momento vociferaba que podría salir airoso del atolladero judicial en que se encontraba inmerso.

Más sin embargo la suerte le cambió al “ahijado político” de Víctor Manuel Castro Cosío, pues desestimó todo lo relativo a la demanda interpuesta en el Juzgado Segundo Civil de Primera Instancia -Expediente 231/2020- por la falta de pago al adeudo de 2 millones de pesos que de buena fe le otorgó el empresario Alejandro Rojas; y después sin recato alguno menospreció la denuncia penal fincada en su contra al haber falsificado firmas y documentos con la finalidad de zafarse del meollo en cuestión.

Para entendernos mejor, vale la pena recordar que derivado del seguimiento realizado a las demandas mercantiles interpuestas en contra de Oscar Leggs Castro, los abogados de Alejandro Rojas acudieron -el 7 de octubre del año 2020- a revisar el expediente y se percataron de la existencia de un documento agregado con la firma apócrifa del jurisconsulto Raúl Chollet, buscando con tal marrullería legaloide aparentar que se desistía del juicio mercantil, lo cual evidentemente era falso de toda falsedad.

Obvio que Oscar Leggs Castro –pecando de ingenuo por decir lo menos- creyó que con eso ya se había zafado del compromiso, pero no fue así, pues tal situación se hizo del conocimiento al Juez de la causa y se le dio vista al Agente del Ministerio Público de lo que en apariencia era un delito consumado.

Y como no había de otra, el mismo abogado Raúl Chollet presentó denuncias formales en contra del hoy aspirante a alcalde de Los Cabos por la coalición Morena y Partido del Trabajo, esto por su posible participación en hechos constitutivos por el ilícito de falsificación o alteración y el uso indebido de documentos.

Luego entonces para Oscar Leggs Castro la suerte si le cambió radicalmente, pues el latrocinio cometido se encuentra previsto y sancionado por el artículo 359 del Código Penal en vigor en el Estado, el cual marca la penalidad de uno a 5 años de prisión y una multa de hasta de 100 días de salario, esto en el entendido de que dicho numeral no solo castiga la falsificación del documento sino también el uso que se le pueda dar al documento falsificado, ya sea por el falsificador o por una tercera persona. ¡Quihubole!

Todo este meollo trajo como consecuencia que se abriera la Carpeta de Investigación –CSL/3231/2020- en la Unidad de Delitos Diversos de la Subprocuraduría Zona Sur con residencia en Cabo San Lucas, y donde el Agente del Ministerio Público se allegó de todos los datos de prueba necesarios para acreditar la existencia del ilícito así como la posible participación del imputado Oscar Leggs Castro, lo que podría desencadenar ahora en una sentencia condenatoria y esfumarse de tajo los sueños guajiros que tiene el de Migriño de ser algún día alcalde de Los Cabos.

Y lo digo porque el ahijado político de Víctor Manuel Castro Cosío, o sea Óscar Leggs Castro, se vio antier involucrado en un embargo precautorio por parte del personal del Juzgado Segundo de Primera Instancia del Ramo Civil, ello derivado de la deuda que contrajo con Alejandro Rojas por 2 millones de pesos y que hasta el momento no ha logrado o no ha querido cubrir.

Se supo además que la diligencia de emplazamiento, requerimiento de pago y embargo de bienes fue necesaria para garantizar que el mal logrado candidato de la coalición Morena y Partido del Trabajo liquide su deuda, esto judicialmente hablando.

Y sucedió porque cuando Oscar Leggs Castro se vio acorralado no tuvo de otra más que reconocer la existencia del adeudo contraído con el empresario, y para ello señaló bienes para garantizar el pago; esto sin desestimar que continúa con otro proceso judicial –de índole penal- en contra de quien le da por irse de fuga a Migriño por hechos que podrían constituir claramente un delito, lo que le podrá traerle como consecuencia la pérdida de la candidatura que ostenta en la actualidad tras dicha sentencia.

Por este bochornoso actuar, son muchos los que piensan que Alejandro Rojas no era merecedor de tan lamentable traición, pues le brindó su amistad sincera a Oscar Leggs Castro apoyándolo cuando más lo necesitaba, pero el taimado morenista cual víbora le lanzó toda su ponzoña con alevosía e infamia sin que el ahora candidato de Nueva Alianza se lo esperara.

Así, seguramente quedará claro que al malagradecido de Oscar Leggs Castro se le olvida fácilmente cuales son las manos que lo ayudan a salir de los atolladeros en los que se mete, por lo que la miseria lo acompañará siempre y quizás llegue su tiempo para que aclare su memoria dándose cuenta de su lastimoso actuar; por ella lo que mientras quien esto escribe mejor seguirá BALCONEANDO. . .