BURÓ POLÍTICO
En tanto se acercan los tiempos de las definiciones de todos los partidos políticos en lo que se refiere a las candidaturas que estarán en disputa en el próximo proceso electoral, muy importante será para la ciudadanía conocer a quienes aspiran representarnos; en el caso muy particular de aquellos políticos que tienen la intención de competir por la gubernatura del estado, será importante conocer sus proyectos o su visión de gobierno, que sean claros en su mensaje y no intenten engañar a la sociedad con discursos falsos o promesas difíciles de cumplir pero fáciles de prometer. Vaya pues, que no sean demagogos.
El caso más claro que podemos encontrar en el estado es el del aspirante a la gubernatura por el partido morena, Víctor Castro Cosío, quien es el típico político que polariza, lo cual podemos apreciar en los comunicados de prensa que maneja como parte de su estrategia de posicionamiento político. Conceptos como el pueblo, o los del pasado, rescatar los privilegios, ¿Quién es realmente el pueblo para el maestro jubilado? ¿a quién se refiere textualmente como los del pasado? ¿no fue precisamente el Puchas, como le dicen sus amigos, parte de los políticos del pasado? ¿Quiénes pretenden rescatar los privilegios? ¿Acaso sus amigos que fueron sacados del gobierno hace menos de diez años?
Víctor Castro es un clásico populista. Sin un plan de gobierno claro y sin propuesta concreta, pretende llegar a la candidatura de morena para después vender futuro, prometer becas y más becas como si eso fuera lo único que necesita un estado y una sociedad que desea progresar, crecer, generar oportunidades de un mejor vivir. Nada de eso hay en la retórica del ex delegado de programas de bienestar. No estoy en contra del apoyo social, pero un gobierno no puede estar basado únicamente en ese rubro y quien pretenda gobernar Baja California Sur debe tener una visión más amplia.
Nuestro estado es una tierra de trabajo, de esfuerzo por salir adelante, de hacer producir la tierra, de la faena diaria en la pesca, pero sobre todo ha encontrado su vocación en el turismo y los servicios. Aquí no hay víctimas ni salvadores, no hay lugar para la polarización ni el populismo que quiere vender con sus discursos el profesor Víctor Castro Cosío. Hay que ser insistentes en ese tema porque en los procesos electorales ya hemos sido testigos de que las palabras importan y por supuesto influyen, sobre todo porque se habla de necesidades, materiales o emocionales, de los votantes. Les encanta a los demagogos.
Víctor Castro suele hablar mucho de los pobres y de los beneficios de los programas sociales, pero esos son del gobierno federal y el profe jubilado quiere ser candidato al gobierno de nuestro estado y para eso no tiene visión de futuro. Ni siquiera ha levantado la voz para defender los intereses de los habitantes de Baja California Sur que se vieron afectados con la desaparición de programas esenciales para atender a los más pobres, programas de empleo temporal, el seguro popular que brindaba consulta y medicamentos gratis. El ahora INSABI no ha funcionado, la falta de medicamento y atención están a la vista de todos. El fondo minero, que por más que prometieron que sería un recurso entregado de manera directa, nomás no llegó.
A lo anterior le podemos sumar la falta de transparencia que hay en los programas del bienestar, la poca o nula información acerca de a quien se le entrega o los censos que han levantado los llamados ciervos de la nación, que por cierto en su mayoría son seguidores de morena y, en el caso particular de BCS, del ex delegado Víctor Castro Cosío.
De tal suerte que para este proceso electoral los ciudadanos deben ser más reflexivos al momento de elegir a los candidatos al interior de cada partido y luego a quienes serán los responsables del gobierno y el futuro de Baja California Sur. Por eso si te llega la encuesta, pensar primero antes de la respuesta. Ya veremos qué sucede, es mi opinión, al tiempo…
Sus comentarios a rostrosyperfilesbcs@gmail.com
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