BURÓ POLÍTICO
POR ARIEL VILCHIS
Ricardo Velázquez Meza, es uno más de los muchos accidentes políticos que tuvo MORENA en 2018. Sin grupo político propio; sin presencia territorial fuerte, ni en el norte, mucho menos en el sur, salvo que con los votos de “Palo Verde” se gane una senaduría o una gubernatura; sin experiencia política; rechazado en todos los demás partidos; mediocre como abogado -otra cosa es que sea abogagster en eso de quedarse con tierras ajenas-; ni siquiera con una personalidad arrolladora; por eso nadie se explica cómo fue seleccionado suplente de senador, solo que intereses económicos o de otro tipo le hayan catapultado hasta el Senado de la República, antecedentes que habremos de investigar.
Ricardo Velázquez alias “La Comadreja”, ya no haya que hacer o que inventar para resaltar, posicionarse, darse a conocer, lucirse, notarse, crecer políticamente. Sus esfuerzos en ese sentido hasta ahora han sido vanos, porque hasta el día de hoy “La Comadreja” no tiene una trayectoria política seria, sostenida, ya fuere positiva o negativa, es como la “caca” de gavilán, ya que ni hiede ni huele, ahí anda ocupando un espacio por accidente.
Su última farsa, la del título comprado de “Doctor Honoris Causa”, por el que pago 100 mil pesos, y que le fue otorgado por el Instituto Mexicano de Lideres de Excelencia, una organización de alto “pedorraje” dedicada precisamente al cultivo del ego de farsantes como “La Comadreja”, o de payasos y comediantes como “Kiko” o Jaime Maussan, así se las gasta el integrante de la 4 Transformación que juro no engañar, no traicionar, y no robar al pueblo.
El asunto de fondo con “La Comadreja” Velázquez Meza, después de su honoris causa patito, es que ya no hay porque creerle nada, si, nada, pues quedo exhibido como eso, como un farsante profesional, al que le gusta que le veneren, le alaben, le lambisconeen, por tener el ego grande y la autoestima muy baja, como en el cuento danés “El Rey Desnudo”, al que engañan unos estafadores al picarle su ego y exhibirle su estupidez.
De tal suerte que ¿Quién le cree al senador comadreja?, calculo que ya muy pocos o casi nadie, que manera tan chafa de echar a perder un espacio de representación popular, una novatez cuyas repercusiones creo no han sido medidas seriamente por quienes mandan en MORENA, porque quizás ya están resignados al pulular de estos mamíferos mustélidos, bastante mañosos por cierto, dada sus características parecidas a los roedores. Así las cosas, es mi opinión, al tiempo…
Sus comentarios a rostrosyperfilesbcs@gmail.com
POR ARIEL VILCHIS
Ricardo Velázquez Meza, es uno más de los muchos accidentes políticos que tuvo MORENA en 2018. Sin grupo político propio; sin presencia territorial fuerte, ni en el norte, mucho menos en el sur, salvo que con los votos de “Palo Verde” se gane una senaduría o una gubernatura; sin experiencia política; rechazado en todos los demás partidos; mediocre como abogado -otra cosa es que sea abogagster en eso de quedarse con tierras ajenas-; ni siquiera con una personalidad arrolladora; por eso nadie se explica cómo fue seleccionado suplente de senador, solo que intereses económicos o de otro tipo le hayan catapultado hasta el Senado de la República, antecedentes que habremos de investigar.
Ricardo Velázquez alias “La Comadreja”, ya no haya que hacer o que inventar para resaltar, posicionarse, darse a conocer, lucirse, notarse, crecer políticamente. Sus esfuerzos en ese sentido hasta ahora han sido vanos, porque hasta el día de hoy “La Comadreja” no tiene una trayectoria política seria, sostenida, ya fuere positiva o negativa, es como la “caca” de gavilán, ya que ni hiede ni huele, ahí anda ocupando un espacio por accidente.
Su última farsa, la del título comprado de “Doctor Honoris Causa”, por el que pago 100 mil pesos, y que le fue otorgado por el Instituto Mexicano de Lideres de Excelencia, una organización de alto “pedorraje” dedicada precisamente al cultivo del ego de farsantes como “La Comadreja”, o de payasos y comediantes como “Kiko” o Jaime Maussan, así se las gasta el integrante de la 4 Transformación que juro no engañar, no traicionar, y no robar al pueblo.
El asunto de fondo con “La Comadreja” Velázquez Meza, después de su honoris causa patito, es que ya no hay porque creerle nada, si, nada, pues quedo exhibido como eso, como un farsante profesional, al que le gusta que le veneren, le alaben, le lambisconeen, por tener el ego grande y la autoestima muy baja, como en el cuento danés “El Rey Desnudo”, al que engañan unos estafadores al picarle su ego y exhibirle su estupidez.
De tal suerte que ¿Quién le cree al senador comadreja?, calculo que ya muy pocos o casi nadie, que manera tan chafa de echar a perder un espacio de representación popular, una novatez cuyas repercusiones creo no han sido medidas seriamente por quienes mandan en MORENA, porque quizás ya están resignados al pulular de estos mamíferos mustélidos, bastante mañosos por cierto, dada sus características parecidas a los roedores. Así las cosas, es mi opinión, al tiempo…
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