¿QUIÉN LOS DETENDRÁ?

BALCONEANDO

Por Alejandro Barañano

La dudosa compra venta de terrenos en playas de Los Cabos, donde los bancos españoles Bankia y Caixa Bank son señalados por presunta evasión de impuestos, fraude y probable lavado de dinero, han puesto los ojos del sector inmobiliario en los inmuebles donde ambos bancos tienen participación.

Pero no sólo aquí se cuecen habas, pues en Playa del Carmen en Quintana Roo, el sector de los bienes raíces alertó sobre la reproducción del mismo modus operandi donde Bankia y Caixa Bank están simulando rematar a precios del 15 por ciento de su valor real, departamentos de lujo en el Resort Gran Coral de la Riviera Maya, donde dicho inmueble fueron adjudicados por ambos bancos a raíz de un supuesto incumplimiento en el pago de los créditos invertidos para su desarrollo.

¿Qué cómo operan? Pues bien, estos bancos se quedan con la propiedad, y ya con la posesión hacen una venta simulada pero lo hacen entre ellos, ya sea con los mismos funcionarios de los bancos ya que solamente pueden comprar ellos, pues ha habido personas que han llegado con propuesta para comprarlos pero les ponen muchas trabas.

También hay que tomar en cuenta que el fraude inmobiliario tiene distintos modus operandi, algunos van desde la falsificación de documentos, la corrupción de autoridades y el engaño, y existen datos en donde es probable que en estos bancos la forma de operar sea realizando este tipo de créditos, claro ya predeterminados a que no se van a cumplir, para así quedarse con esas propiedades es una forma de adquirir muy bajo costo.

El Resort Gran Coral está ubicado en la carretera Federal Chetumal-Cancún en el kilómetro 294, en Playa del Carmen, y es un amplio complejo que cuenta con un campo de golf de 18 hoyos diseñado por Nick Price, con acceso directo a la playa, gimnasio, spa y áreas de primer nivel.

Hasta ahí todo suena fastuoso, pero resulta que los departamentos de este complejo están siendo rematados en tan solo un 15 por ciento de su valor real, incluso los responsables de la comercialización se han dado el lujo de rechazar mejores ofertas de compra, por lo que se evidencia que el Resort Gran Coral lo están comprando los propios funcionarios del banco a precio de remate para hacerlo más accesible, pagar menos impuestos y derechos a la Hacienda Federal y paralelamente depreciar el valor de los bienes raíces en este destino turístico que ha sido asechado por el fraude inmobiliario.

No se debe perder de vista que Bankia y Caixa Bank tuvieron un proyecto de fusión en el año 2011, la cual no se concreta ya que a mediados del 2012 Bankia entró en crisis y fue absorbida parcialmente por el gobierno español, y en el año de 2013 se declaró la quiebra. Pero la importancia de esto radica en que Bankia y Caixa Bank fueron parte del boom inmobiliario español dentro y fuera del territorio Ibérico, y en el caso de México fue a través de estos bancos que grupos hoteleros financiaron proyectos tanto en Cancún como en Los Cabos.

Un claro ejemplo de esto fue cuando en septiembre de hace un año, bajo el protocolo notarial número 67535, la empresa mexicana Inmobiliaria Piedras Bolas SA de CV, propiedad del banco español Bankia, vendió a la empresa española IBEROSTAR un terreno de playa de más de cuatro millones de metros cuadrados colindando con el mar de Cortés, denominado “El Zacatón” y con autorización para construir 24 mil cuartos hoteleros.

El valor nominal que aparece en la escritura es de 45 millones de dólares, lo que viene a significar un pago por metro cuadrado de once dólares, y con esta operación IBEROSTAR batió récord, pues su costo por habitación autorizada es inferior a los 2 mil dólares, cuando en la actualidad se han estado pagando a razón de más de 50 mil dólares. Buen negocio. ¿O no?
Paralelamente el Ayuntamiento de Los Cabos que aun preside Arturo De la Rosa Escalante, ha fijado como precio catastral total a los 81 lotes que componen el desarrollo de 400 hectáreas por la cantidad de mil 168 millones de dólares, esto valorando el predio de acuerdo a otros similares y con la misma densidad turística vendidos en las mismas fechas.

De ahí es que nacen varias interrogantes: ¿Qué están haciendo las empresas españolas en México ante la cara de nuestras autoridades de Hacienda? ¿Nos convirtieron en Paraíso Fiscal para sus “lavados”? ¿O será quizás un “arreglo” de funcionarios españoles enriqueciéndose en México robando a sus propias empresas? Preguntas siguen habiendo muchas, respuestas muy pocas o ninguna, por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .